Ingmar Bergman consideraba que Andrei Tarkovsky había inventado un lenguaje nuevo, afín a la naturaleza del cine. Un lenguaje que podía reflejar la vida como sueño.
Cuento, dramaturgia y prosa. Narraciones para cine es una vista a ese mundo: relatos, escritos previos a los guiones cinematográficos, piezas literarias que permanecían hasta ahora inéditas en español.
Paisajes brumosos e inmensos signados por la agonía, los restos de la guerra y personajes que viven entre lo profano y lo sagrado, lo oscuro y lo luminoso, atravesando aquello imposible a los ojos del sentido común.
Narraciones de las películas Solaris, Stalker, Blanco, blanco día (El espejo), Nostalgia y Sacrificio, y escritos para cine no fueron filmadas: Viento luminoso, Hoffmanniana y Sardor. Y los guiones de rodaje de los films: La aplanadora y el violín y La infancia de Iván.
